miércoles, 9 de noviembre de 2011

RAFA LARREINA, EL FAKIR Y LOS ESPÁRRAGOS

La primera vez que vi en televisión la actuación de un fakir me quedé pegado al sofá. Un barbudo con turbante, después de reposar en una cama de pinchos, se tragaba un sable sin condimento ni aliño alguno. Hasta la empuñadura. Y, para aligerar la digestión, rompía una bombilla y la deglutía como si fuera un solomillo.
¡Jesús, que ardor de estómago!.


Dice la sabiduría popular, que para ayudar al organismo a asimilar ingestas duras es conveniente nutrirse con alimentos ricos en fibra. Si, ya sé que me dirán que hasta José Coronado ha hecho publicidad de compuestos tan sabrosos y tan buenos que te cagas (perdonen la cita escatológica pero la ironía iba perfecta).



Mi madre, que de bífidus no sabe gran cosa, siempre ha sostenido que los espárragos eran “cojonudos”, para la buena digestión. Eso y el bicarbonato, aunque este compuesto tenga sus efectos secundarios. O primarios, depende. Yo, cada vez que tomo bicarbonato, hablo con las tripas. Debe ser el idioma de los neandertales. Los cantantes expanden el diafragma para agrandar la voz. A mí, la voz me sale espontáneamente y sin domar. Que aproveche.

Rafa Larreina es el candidato número dos de la nueva Izquierda Abertzale por Gipuzkoa. “RRRafa” es un viejo conocido. Era el coordinador de una cosa que se llamaba IAB-CEN (Ikasle Abertzale Batza-Comité de Estudiantes Nacionalistas) en mi época universitaria.
Era un tío trabajador. Metódico. Prudente. De esos que a los heterodoxos como yo nos daba un poco de repelús. Tenía fama de ser algo así como el “repelente niño Vicente”, pero la verdad es que fue muy activo en su militancia nacionalista de juventud.


En la escisión del PNV cruzó el puente y se situó en Eusko Alkartasuna donde emergió como uno de sus líderes de mayor proyección. Ha sido miembro de la ejecutiva de dicha formación y parlamentario vasco desde 1990 hasta 2009.


Larreina, quien jamás ha ocultado su compromiso con el Opus Dei, es un hombre de profundas convicciones morales y éticas. Sus pronunciamientos, con mayor o menor grado de acierto, siempre han sabido diferenciar las líneas rojas de la vulneración de los derechos humanos fundamentales.

Sin embargo, y sorprendentemente, su nueva evolución política en el ámbito del “Polo soberanista” parece haberle transformado. Es como si hubiera querido correr demasiado y, en lugar ganar la nueva orilla política a través del puente trazado por “Amaiur” hubiera querido llegar al otro lado por abajo, a través del río.

El pasado domingo, en el polideportivo “Anaitasuna” de Iruña, la Izquierda Abertzale escenificaba su tradicional acto electoral central en Nafarroa. Allí, ante un encendido público que coreó las consignas propias a favor de la amnistía, los presos, etc, abrió el acto político el remozado dirigente “abertzale y de izquierdas” Rafa Larreina. Sus palabras no sonaron extrañas al auditorio. Las podía haber pronunciado cualquiera de los históricos activistas de Batasuna que allí había. Pero surgidas de su boca sonaron como las que en mí provoca el bicarbonato.


El ex secretario de organización de EA, se refirió al nuevo escenario político que vive Euskadi, y en relación a la necesidad de reparar el daño causado a las víctimas afirmó que “la petición de perdón por parte de la izquierda abertzale sólo se producirá cuando las instituciones del Estado sean capaces de reconocer lo que han hecho en las calles, las comisarías y lugares de detención”.

Ni el borroka más borroka había tenido tanto atrevimiento para decir semejante inconveniencia. Las aguas purificadoras del “Jordán”, en su renovado bautismo ideológico, le pueden causar un corte de digestión. Evolucionar súbitamente de la socialdemocracia a la radicalidad tiene sus riesgos.
Es como hacer de fakir sin comerse antes unos espárragos. Pero ojo, amigo Rafa, los espárragos se tragan una vez sacados de la lata. No al mismo tiempo.

En el “Día de la Memoria”, que nadie más insulte a nuestra inteligencia.

6 comentarios:

  1. Eres todo un "gran" estomago agradecido del PNV. Sigue asi que podras llegar a ser candidato para Bilbao del PSOE. O alcalde de Barakaldo.

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  2. Eskerrik asko zure arretagatik, tragasables

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  3. Todavía sigues en la mesa de Bizkaia?, ese puesto que debería corresponder a la 2ª fuerza (BILDU).
    Qué mesa, Diosito!, qué mesa.. con la Begoña Gil y demás peperos!

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  4. Correspoder por qué? Te recuerdo que el PNV no votó a nadie que no fuera sus candidatos. Ahora, si Bildu no supo o quiso sentarse a negociar con nadie - psoe y pp lo hicieron- que vaya protestar al maestro armero. Está bien que echeís la culpa de vuestros errores a los demás . Y, por favor, no mires al PNV que no hizo ningun cambalache para eliminar a Bildu de la mesa. Estábamos dispuestos, si fuera preciso, a prestarle cinco votos para forzar un cuadruple empate a 17 (saldrían los represnetantes de las opciones más votadas), pero Bildu pensó que el puesto en la mesa le tocaba por designio divino. Como la presidencia de Eudel por tener la alcaldía de Tolosa. Un poco de seriedad. Aunque sea revolucionaria.

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  5. Bildu negoció lo mismo y de la misma forma que en Araba y Gipuzkoa (respeto a todas las fuerzas según su representación), no nos cuentas milongas que fue penoso, Koldo!.. pasa que te encuentras al "harrokeria" del BBB (Bizkai Buru Batzar), con su pique y mal ganar!

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  6. Designio divino no, Koldo, simple respeto democrático a todas las fuerzas votadas, según su representación.
    Hasta en el Parlamento Navarro, los "cabestros" de UPN lo entendieron, para algo tan simple y democrático no hace falta más de 1 minuto de reunión, claro llegó el BBB y mandó a parar.
    A joder a Bildu en Bizkaia, por sus excelentes resultados, mal ganador, Koldo!

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