jueves, 19 de enero de 2012

EL TURISMO VASCO SIN DONOSTIA Y BIZKAIA, O LA VERSIÓN DEL OASIS

Ni una sola cita a Bizkaia. Ni a Donostia. Bilbao fue mencionada en una sola ocasión. La promoción turística de Euskadi en la feria estatal “FITUR” fue, una vez más, la loa al “oasis vasco”. Los dos principales focos de atracción que concitan mayor número de visitantes/año –Bilbao (Bizkaia) y Donostia- desaparecieron de los discursos oficiales del Lehendakari. ¿Olvido? ¿error de cálculo?. Toda una paradoja.


Resulta recurrente el paréntesis sin contenido que el Gobierno vasco y sus dirigentes mantienen a la hora de presentar la oferta vasca de ocio y turismo en el exterior. Un silencio incomprensible ya que tanto Bilbao como Donostia son los principales faros que alumbran la pujanza del nuevo sector turístico de Euskadi.

Donostia, con su cautivadora imagen tradicional, reforzada ahora por la capitalidad cultural, y Bilbao – la ciudad de moda en la innovación mundial-, no existen para quienes deben representar la acción promotora de nuestro territorio. Los silencios resultaron tan evidentes en Madrid que vascos tan renombrados en la capital del Estado como Miguel Zugaza –Director del Museo del Prado- mostraron su elocuente extrañeza por la omisión.

No resulta entendible el silencio. Máxime cuando el Lehendakari ostenta la presidencia de un museo como el Guggenheim bilbaino, que por sí mismo capta al año a cerca de un millón de visitantes (en un alto porcentaje ajenos a nuestro territorio). Y es que la no exhibición exterior del Guggenheim, reclamo excepcional de la nueva sociedad vasca, se ha convertido en algo habitual. ¿Complejo? ¿minusvaloración?.


La desafección del Gobierno vasco para con el Guggenheim resulta chirriante, cuando no ridícula. ¿Quién puede entender que alguien oculte en su escaparate lo que mayor atención cautiva en el exterior?.

Por el contrario, abundan las referencias a la gastronomía, las actividades en la naturaleza, el senderismo, la enología…Y todas estas cualidades que la sociedad vasca posee son importantísimas a la hora de presentar una oferta de ocio y turismo. Pero su presencia en el abanico de oportunidades no debiera hacer olvidar los puntos referenciales que provocan la atracción de visitantes a nuestro país.

Afortunadamente, este intencionado abandono de respaldo externo está cubierto por la propuesta conjunta llevada a cabo por el ayuntamiento bilbaino y la Diputación de Bizkaia bajo la marca común de Bi2.

Alguien, aprovechando la circunstancia, hablará ahora de “duplicidades”. Duplicidad es tener un Gobierno vasco de ficción.

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