viernes, 5 de abril de 2013

VISIONES, ALUCIONACIONES Y REALIDADES

Todos hemos tenido, en algún momento de nuestra experiencia vital, esa sensación de haber tenido una aparición inexplicable. Bien en sueños o en estados de letargo mental. Yo no soy una excepción. Ya lo he contado en varias ocasiones, pero la secuencia de una plácida jornada de pesca en un paradisíaco paisaje, con picada incluida de salmón, se me truncaba con la irrupción –pertinaz, porque el sueño se repitió en varias ocasiones- de un personaje que me increpaba sin venir a cuento rompiendo el hechizo del momento. Mi inconsciente también me llevó a unas conversaciones secretas entre los principales dirigentes vascos, reunidos para solucionar el “conflicto” en un refugio religioso. Unas conversaciones que sólo comenzaron a fructificar cuando cada cual desnudó sus apriorismos con el adversario discutiendo en calzoncillos. La paz en paños menores tras los muros de un santuario.


A Goio, aquel mocetón encartado, que dirigió el consistorio de Galdames durante varias legislaturas, se le aparecía en sueños, según contaba con su especial gracejo, Sabino Arana. Recuerdo con qué vehemencia contaba en el comedor de Montellano, sus conversaciones con Sabino. El contacto nada tenía que ver con la política sino con la preocupación que el sordo alcalde de Galdames tenía con la “plaga” de corzos que invadía sus campos, destrozando toda la plantación de jóvenes manzanos que había repoblado recientemente en una finca. Goio quería sacar la escopeta y en un “ti-ta” acabar con el problema. Sabino, que en su juventud había sido cazador le aconsejaba en su encuentro metafísico que no hiciera tal cosa. Que existía el riesgo de que los guardas forestales de la Diputación le “sacudieran” luego a él una multa de la que arrepentirse.

Y Goio, un jeltzale sabiniano hasta la médula, acabó por hacer caso de los consejos del “maestro”. Sabino , no debió de morir.

El actual vicepresidente de Venezuela y candidato revolucionario a la jefatura de la república bolivariana, ha tenido estos días su especial “aparición”. Me enterneció escuchar de su boca el encuentro metafísico http://youtu.be/qv5dAqSS0XU . El candidato oficialista venezolano Nicolás Maduro relataba en la casa natal del recientemente fallecido presidente Hugo Chávez que sintió que éste se le aparecía en forma de "pajarito chiquitico" y lo bendijo al arrancar la campaña electoral.

“Entró volando –contaba Maduro con pasión mística- y me dio tres vueltas aquí arriba (por encima de la cabeza). Se paró en una viga de madera y empezó a silbar (chui-chui, chui-chui). Me le quedé viendo y yo también le silbé. Si tú silbas, yo silbo. (fuii-fuii). Se me quedó mirando. Dio otra vuelta y se fue. Entonces yo sentí el espíritu de él (Chávez) como dándonos una bendición. Hoy empieza la batalla. Arranquen hacia la victoria. Tienen mi bendición”.

Perdone el lector la atropellada transcripción del relato, pero al hacerla se me saltaban las lágrimas de emoción. ¡Qué momentazo! Que diría Boris Izaguirre. Seguro que los “bolivarianos” de Bildu reservan la revelación entre sus videos de primera.

Los del “modelo alternativo” también tienen su corazoncito. Corazoncito solidario. Veremos cuanto tardan en hacer aparecer en sus encuentros banderas norcoreanas. Será por solidaridad internacional. Seguro.

Quien más que una aparición ha tenido un despertar traumático ha sido Cristina de Borbón. Su imputación en el caso “Nóos”, sustentada por el juez que instruye la causa en catorce indicios de “cooperación necesaria” en diferentes delitos investigados, ha revolucionado el panorama político y mediático. La afección a la Corona española de un caso de corrupción ha terminado por poner contra las cuerdas a la propia jefatura del Estado, cuya reacción de “sorpresa” ante el auto judicial ha acrecentado la sensación de que, por primera vez, la Corona española está en entredicho.

La “imputación” en el procedimiento jurisdiccional español no es, como se piensa vulgarmente una condición de culpabilidad, sino , por el contrario, una medida cautelar garantista que persigue la protección jurídica de una persona concreta, a la que le asiste el derecho a no declarar o de hacerlo acompañada de su asistente legal.

Dicho esto, que la Infanta Cristina pudiera acabar imputada en la causa “Nóos” era un hecho cierto conocido desde meses atrás. Su plasmación concreta en este momento, lo único que aventura es que el juez que instruye la causa está a punto de cerrar el expediente dando paso, tras la calificación de las partes, al juicio oral. Es decir, que ha esperado a que la investigación esté básicamente finiquitada para dar el paso procesal que debía derivarse de los indicios observados.

Las reacciones a la imputación de la hija del Rey español, en especial las del Gobierno y la fiscalía sólo admiten una interpretación; la estabilidad de la Corona parece estar en juego y ese dicho de que la “justicia actúa de manera igual para todos” puede quebrarse si alguien aparta a empujones del caso a la infanta Cristina.

La opacidad en la que ha vivido la Monarquía, que le ha permitido hacer y deshacer a su capricho desde siempre, se debe acabar ya. O desaparece el oscurantismo o la propia Monarquía. Por eso, cuando se ha encendido un foco sobre la Casa real, lo que hasta ahora era “normal” se ha convertido en “paranormal” y la visión azucarada de reyes, príncipes y princesas a la que nos habían acostumbrado ha devenido en una pesadilla de horrores, desmanes y contubernios. Y todo ello sin que intervenga “pajarito” alguno ni visión sobrenatural que obre el milagro. Simple y llanamente parece haber bastado con encender la luz en la Zarzuela.

Por eso creo que decir, como lo ha afirmado el ejecutivo de Rajoy, que la imputación de la infanta perjudica a la “marca España” es una soberbia memez. La “marca España” está por los suelos porque su propio Jefe de Estado, la echó por tierra cazando elefantes en la sabana africana con una misteriosa señorita mientras su país se hundía en la miseria y el paro. ¿Descrédito?, el de la propia familia real, cuyos miembros están envueltos en estafas millonarias. Cambalaches que, al parecer, eran conocidos por el cabeza de familia quien en lugar de denunciar y poner fin a estas tropelías, envió a sus autores a Washington con un salario millonario

¿Descrédito? el generado por un presidente del tribunal supremo, obligado a dimitir por haber malgastado dinero público en excursiones románticas de fin de semana. O por el máximo representante de los empresarios, imputado en una quiebra fraudulenta que dejó sin pagar a empleados, proveedores y acreedores mientras amañaba mafiosamente la ocultación de su fortuna. Por no hablar de quienes dilapidaron los fondos de las Cajas de Ahorro en beneficio propio. O de quienes supervisaron dichas entidades, aprobando fusiones como la de Bankia , ese engendro financiero insolvente cuya salida a bolsa bajo la supervisión de la Comisión Nacional del Mercado de Valores acabó con los ahorros de miles de ciudadanos españoles.

¿Perjudicar la imagen de la “marca España”?. ¿Qué imagen?. ¿La de aeropuertos sin aviones? ¿La de autopistas sin vehículos?. La de las estaciones del AVE sin viajeros, la de las macrociudades fantasmas?.

Esa imagen no la ha dañado ni una imputación judicial ni los “enemigos” de España, los “soberanistas” vascos o catalanes.

¿Será un sueño? ¿Una pesadilla? ¿Un mal de ojo?. ¿Una alucinación?. Pellízquense de una vez, que verán que están despiertos.





2 comentarios:

  1. Kaixo,atzo eduki nuen nik zuk artikuluan aipatutako,ustezko,amets gaizto bat.Txatxamurka jardun nintzen telebista aurrean eta esna nengoela konturatu nintzen,ordea.Gauza da,hiru urte ikusi barik egon naizen Teleberria piztu nuenean,"Sierra de Castellón","Albarracín" eta "media España" delako elur jausiaren ondorioak eta hango jendearen adierazpenak ikusten bizpahiru minutu(gutxira jota) egon nintzela.Tarteka,nire telebistaren goi parteko alde eskuina begiratzen aritzu nintzen,ea,azken hiru urte hauen ohitura dela eta,Telecinco,antena3 edo TVE jarrita nuen berriro baino ez.....ETBko Teleberria nuen ikusgai.
    Akaso goizegi izanen da,baino desilusioa ez da ongarri aproposa "dena emoteko"......Agurrak.

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  2. Tenemos como vascos la obligacion de seguir soñando y entre noche y dia,seguir nuestro camino y en memoria de mi Aita decir como el, "tiempo al tiempo". Amets goxo bat euki dut eta amets horretan euskadi bakarrik nuen aberri.

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