Egon ginenok, gaude. Gaur, atzo bezala, giza eskubideen alde , adierazpen askatasunaren alde geundenak gaude. Betiko moduan.
Zutabe demokratikoak ondo finkatuta ditugunok beti egon gara leku berean; askatasunaren gunean. Horregaitik, zorionak “Egunkaria”ren ordezkariei. Zorionak be , zazpi urte pasa ta gero , justizia lortzeagatik.
Ifernuko bide makal eta mingarri pasatu behar dute Egunkariaren lagunak. Bainan bide horretatik azken mugatan egia agertu da . Eta Españako Auzitegi Nazionalen azken hitza ondoren agertu dira baita ere , askatasunaren mozorroekin jantzitak, irurzurrak.
Sí. Quienes estuvimos, estamos. Los que nos manifestamos por las calles de Donostia, de Bilbao y de Euskadi en defensa de todos los derechos humanos y por el derecho a la libre expresión, seguimos estando aquí. Quienes siempre hemos tenido firmemente consolidados los principios democráticos, siete años después, seguimos aquí. Diciendo lo mismo.
Los que suscribimos manifiestos de apoyo y solidaridad. Los que acudimos a citas solidarias, los que siempre creímos en la inocencia de los encausados, los que repudiamos las excepcionalidad del cierre de un medio de comunicación, los que denunciamos una estrategia represiva excepcional, los que mantuvimos la presunción de inocencia, los que consideramos que la democracia se encaminaba al abismo con el aznarato y el pacto antiterrorista, seguimos aquí.
Los que siempre nos manifestamos y alzamos la voz contra cualquier atentado, contra cualquier presión injustificable contra periodista o medio de comunicación.
Seguimos aquí para celebrar la sentencia de la Audiencia Nacional, para reclamar justicia, para reivindicar calidad democrática.
Y seguimos aquí para quitar el disfraz a tanto sepulcro blanqueado que nos llamó “filoterroristas”, que echó gasolina al fuego, que indujo a policía, fiscales y jueces a una persecución ignominiosa. A quienes hoy no tienen vergüenza en hablar de “victoria del estado de derecho” cuando convirtieron el caso en estado de desecho.
Sí, esos que hoy se “sienten aliviados” y manejaron los hilos de un estado parapolicial en el que la libertad de expresión fue puesta en cuarentena (siete años de cuarentena).
Zorionak “Egunkaria”. Zorionak democracia. Aquí estamos y estaremos.
Zutabe demokratikoak ondo finkatuta ditugunok beti egon gara leku berean; askatasunaren gunean. Horregaitik, zorionak “Egunkaria”ren ordezkariei. Zorionak be , zazpi urte pasa ta gero , justizia lortzeagatik.
Ifernuko bide makal eta mingarri pasatu behar dute Egunkariaren lagunak. Bainan bide horretatik azken mugatan egia agertu da . Eta Españako Auzitegi Nazionalen azken hitza ondoren agertu dira baita ere , askatasunaren mozorroekin jantzitak, irurzurrak.
Sí. Quienes estuvimos, estamos. Los que nos manifestamos por las calles de Donostia, de Bilbao y de Euskadi en defensa de todos los derechos humanos y por el derecho a la libre expresión, seguimos estando aquí. Quienes siempre hemos tenido firmemente consolidados los principios democráticos, siete años después, seguimos aquí. Diciendo lo mismo.
Los que suscribimos manifiestos de apoyo y solidaridad. Los que acudimos a citas solidarias, los que siempre creímos en la inocencia de los encausados, los que repudiamos las excepcionalidad del cierre de un medio de comunicación, los que denunciamos una estrategia represiva excepcional, los que mantuvimos la presunción de inocencia, los que consideramos que la democracia se encaminaba al abismo con el aznarato y el pacto antiterrorista, seguimos aquí.
Los que siempre nos manifestamos y alzamos la voz contra cualquier atentado, contra cualquier presión injustificable contra periodista o medio de comunicación.
Seguimos aquí para celebrar la sentencia de la Audiencia Nacional, para reclamar justicia, para reivindicar calidad democrática.
Y seguimos aquí para quitar el disfraz a tanto sepulcro blanqueado que nos llamó “filoterroristas”, que echó gasolina al fuego, que indujo a policía, fiscales y jueces a una persecución ignominiosa. A quienes hoy no tienen vergüenza en hablar de “victoria del estado de derecho” cuando convirtieron el caso en estado de desecho.
Sí, esos que hoy se “sienten aliviados” y manejaron los hilos de un estado parapolicial en el que la libertad de expresión fue puesta en cuarentena (siete años de cuarentena).
Zorionak “Egunkaria”. Zorionak democracia. Aquí estamos y estaremos.
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