En una lectura rápida de la prensa internacional he encontrado una noticia insólita. "Detenido el chamán de Evo Morales por narcotráfico". Valentín Mejillones, que así se llama el místico hechicero, se vió sorprendido en la madrugada del pasado miércoles, cuando la policía antidroga boliviana allanó su domicilio, incautándose de 350 kilos de cocaína y otras sustancias.
El chaman, que en dos ocasiones fue quien entregara el bastón de mando a Evo Morales, manifestó tras ser detenido que había sido "engañado" por un grupo de colombianos que le pidieron el favor de utilizar su laboratorio "para hacer unas pastillas de hierba y pomadas".
Pero los argumentos de Mejillones no hicieron sucumbir a la policía boliviana que detuvo al chamán junto con cuatro personas más que se encontraban, en el momento del registro, produciendo cocaina.
Evo Morales, por su parte, guarda silencio ante la detención de su guía espiritual. Después de los dislates pronunciados por el dirigente boliviano en relación a los productos transgénicos , al cambio climático y a las supuestas consecuencias del consumo de pollo -lo vinculaba con la homosexualidad-, más le vale estar calladito. Sólo nos faltaba escuchar que la cocaína encontrada en el laboratorio de Mejillones era para consumo personal.
Tal y como está el circo , todo es posible
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