No encuentro palabras. Mejor dicho, hoy no encuentro la palabra “esperanza” en el vocabulario. Ha desaparecido del diccionario. Juan Carlos Urrutxurtu ha sucumbido a la enfermedad. Hoy, le ha vencido. Ha peleado hasta el final, en la confianza que el transplante de médula le hiciera brotar la vida. Pero no ha sido así. Se ha consumido en el sufrimiento. Dejándonos vacíos por un instante.
Rosi, Jon y Eneritz le han acompañado hasta el final de su camino. Y sus amigos, sus múltiples amigos, hemos asistido a este desenlace en silencio y con el pesar de quien nada tiene en su mano para mitigar tanto dolor. Maldita condición humana.
Juan Carlos ha sido un profesional de comunicación brillante. Le conocí en DEIA hace ya mil años. Pegado a la actualidad, al ejercicio periodístico, a la devoción de servicio a la información de la ciudadanía. Así se mantuvo toda la vida. En la sección política en la que dio cuenta de los hechos más impactantes que sucedían a nuestro alrededor en los años más dinámicos de los últimos decenios.
Luego llegó a la Diputación de Bizkaia e impuso su estilo de transparencia informativa. Siempre pegado al teléfono, reeducando a los cargos políticos para que atendieran a un nuevo tiempo de claridad y nitidez en el desempeño de su función. Y enseñándonos, a unos cuantos, el comportamiento intachable de un comunicador institucional.
Quienes estuvimos a su lado tuvimos la fortuna de encontrar en él a un maestro. A un colaborador capaz de insuflar ilusión hasta en los momentos más críticos. La verdad siempre encuentra una salida. Y él la encontraba siempre. Trabajador sin desmayo, periodista las 24 horas del día. Mensajero de lo grande y lo pequeño.
Lo poco que sé de este trabajo lo aprendí con él. Con su experiencia. Con su respeto a la libertad de expresión y a la verdad.
Hoy, en este momento de noticia desgarradora, no consigo escribir más. Pero estoy seguro que pasado un tiempo, el recuerdo de Juan Carlos brotará. Seguro que brotará en mí y le podré dedicar un homenaje especial.
Juan Carlos Urrutxurtu descansa ya en paz. Agur laguna. Beti arte
Qué mazazo acabo de recibir!. Goian bego Juan Carlos!. Y un abrazo enorme a la familia.
ResponderEliminarLaister arte Juan Carlos:
ResponderEliminarSe nos va unos de los grandes, como persona, como profesional de la comunicación, como abertzale y como jelkide.
"Aquellos a quienes los dioses aman mueren jóvenes"
Agur eta ohore JELpean
Xabier
Se va un gran abertzale y un gran jelkide. Siempre estarás en tu Batzoki de Basauri Juan Carlos. Goian bego! Agur ta ohore JELpean!
ResponderEliminarSe ha ido un gran abertzale basauritarra. En el partido echaremos en falta tu dedicación y optimismo.Eskerrik asko Juan Carlos!! Goian bego!
ResponderEliminarAgur Juan Carlos, como dice Koldo, hasta siempre!
ResponderEliminarRealmente es un día triste en el que lamento la pérdida de Juan Carlos. Profesionalmente lo conocí en 1997 y siempre tuvimos un trato cordial y amable. Descanse en paz.
ResponderEliminarHe tenido la suerte de trabajar con él de la mano en Sevilla. Se ha ido uno de los mejores profesionales de la comunicación con los que he trabajado, pero, ante todo, una gran persona.
ResponderEliminarSu vitalidad, su empuje, su esfuerzo, su manera de luchar por la que cree adecuado han sido sus grandes enseñanzas para este aprendiz de la comunicación.
AGUR Juan Carlos, siempre te tendré en mi corazón.
Raúl.
Ohore haundia ezagutzea, Urru. Eskerrik asko. Goian bego.
ResponderEliminarA mi amigo Juan Carlos... que tengas una eterna travesía, y que navegues por dentro de todo, como a ti te gustaba.
ResponderEliminarAgur Juan Carlos. Dejas un gran vacío como marido, aita y gran persona que siempre fuiste. Te echaremos mucho de menos.
ResponderEliminarGoian bego.