Rafa, ¿te haz fumao un porro?.
Poz zí!
Esa podía ser la secuencia del último capítulo representado por nuestro sainete gubernamental. El pasado lunes, el Consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, acompañado por su mano derecha en el departamento, Jose María Fernández, comparecía ante los medios de comunicación para presentar el sexto Plan de Adicciones de la Comunidad Autónoma Vasca.
Rafael Bengoa, lejos de enmendar el dislate, lo avaló, sentenciando que “la lógica general es no ser prohibicionista”.
El anuncio de la inminente legalización del cultivo y consumo de cannabis, hizo arder Troya. ¿Qué ocurriría con el código penal?. ¿Sería permisiva la justicia ante tal proclama? ¿En qué base legal sustentaban los máximos responsables sanitarios su posición?. ¿Qué diría de esto Ares, el dios de la guerra?
Vamos, que la rueda de prensa gubernamental provocó un colocón mediático. Salut y força al canut.
Después de la “alegría riojana” de días pasados, al prócer de la sanidad vasca, le hacían falta estimulantes y nos regaló un momento inolvidable en este año Mariano.
Lo que ocurre en estos casos es que, el delirio duró poco. Veinticuatro horas más tarde de la sorprendente revelación tuvo que comparecer la portavoz del Gobierno, Idoia Mendia, que como la madrastra de Blancanieves, echó por tierra la promesa de Bengoa y los suyos.
Mendia es como el contestador oficial de un gobierno al que le toca retractarse día sí, día también. La compadezco. Le toca cada papelón que es digna de solidaridad.
La portavoz del Gobierno deshizo el entuerto ya que le tráfico y el consumo de cannabis está prohibido en el código penal y , por lo tanto –aseguró- “el Gobierno vasco no es competente en esta materia”.
Cuanta razón tiene. El Gobierno vasco es incompetente. También en esto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario