miércoles, 14 de marzo de 2012

EL CARAMELO ENVENENADO DEL GOBIERNO VASCO A EUSKALTEL-EUSKADI

El bueno de Miguel Madariaga está al borde de un ataque de nervios. No es para menos. Por un lado se enfrenta a la nueva normativa “Pro Tour” de la UCI que , bajo el objetivo de expandir el ciclismo al ámbito mundial, ha establecido unas exigencias de calendario, plantilla y presupuesto que sólo permitirá , a corto plazo, la existencia en la primera fila internacional del ciclismo de macrofirmas multinacionales, dificultando enormemente la supervivencia de proyectos como el “Euskaltel-Euskadi”, pese a su solvencia deportiva y económica (en su ámbito).



Por otro, Madariaga y el ciclismo vasco que representa el equipo “Euskaltel-Euskadi”, debe atender otro desafío; el del Gobierno vasco, que para mantener su exigua colaboración con el proyecto (ha reducido notablemente ya sus aportaciones económicas) exige de la escuadra vasca cambiar su logotipo en la equipación de competición de la escuadra naranja.



El Gobierno, a través de su Consejería de Industria, Innovación, Comercio y Turismo , argumenta que para su colaboración económica se de necesita rentabilizar publicitariamente su apuesta. Por eso, o la marca   se sustituye por  o el Gobierno de Patxi López deja sin recursos al equipo ciclista. Así de sencillo.

Para algunos, la propuesta carece de polémica, ya que, al fin y a la postre, es el mismo nombre del país –con gráfica distinta- el que aparecería en el maillot-culotte. Sin embargo, la alternativa, planteada como espada de Damocles, tiene su miga.

En primer lugar,  porque la marca que desde su inicio luce el equipo ciclista en su equipación pertenece al propietario de la escuadra; la Fundación ciclista Euskadi, que es quien tiene en su poder la licencia UCI. Además, resulta un poco fuerte, argumentalmente hablando, que un patrocinador –minoritario por cierto- exija al propietario que abandone su marca por la suya. (Suena a chiste).

En segundo lugar, existen patrocinadores del equipo (a través de la Fundación), que hasta la fecha ha renunciado a exhibir sus logotipos viéndose representados por el “Euskadi” que hasta ahora todos hemos conocido. Son patrocinadores institucionales (diputaciones de Bizkaia y Gipuzkoa) , que han rechazado siempre “manchar” el equipo con sus respectivos logotipos. Se trataba de una “opción de país” y como tal, se veían reflejados en el “Euskadi” de la Fundación. Estos patrocinadores – que aportan mucho más dinero al equipo que el Gobierno vasco- no han sido consultados por el Gobierno de cara al imperativo de cambio de marca. Desconozco si la Diputación de Gipuzkoa se sentirá vinculada con el logotipo del Gobierno vasco –creo que no- . Lo que resulta inaudito es que Miguel Madariaga y los responsables de la Fundación ciclista tengan que decidirse en estas condiciones a sabiendas que si accede a la requisitoria del Gobierno vasco podrá cobrar del orden de 400.000 euros (iva incluido), poniendo en riesgo los casi dos millones que aportan Bizkaia y Gipuzkoa.

Y una tercera consideración, la modificación , a estas alturas del calendario, de la imagen corporativa de una formación ciclista, comportaría una sanción por parte de la UCI quien para extender la correspondiente licencia, obliga a cada equipo a establecer la indumentaria y la marca con la que se identificará durante el ejercicio. Es decir que si Madariaga se pliega a lo que el Gobierno le exige, deberá hacer frente, además del coste de la nueva ropa, a una sanción de la UCI.

No me extraña que el bueno de Miguel no duerma. El Gobierno vasco le quita el sueño. Y probablemente el dinero, dejándole en un descubierto de compleja superación.

Quien rubrica este escrito –socio de la Fundación ciclista Euskadi- tiene la percepción de que el Gobierno vasco no sabe cómo desembarazarse de su colaboración con el equipo ciclista Euskaltel-Euskadi. No les gusta el proyecto por la identificación que tiene (es como si fuera nuestra selección nacional) y por eso quiere dejarlo en la estacada. Pero, sin hacer mucho ruido y culpando a los demás de no haber aceptado las “exigencias” que se le supone a una administración pública (publicidad, concurrencia...). Ya me gustaría saber –dicho con todos los respetos- quien reporta más publicidad positiva para el país; el equipo ciclista o el Instituto del Turismo de España, entidad con la que el ejecutivo de Lakua ha conveniado colaboración por 600.000 euros.

Pobre Miguel, te compadezco. Tomes la decisión que tomes serás duramente criticado. Pero no te preocupes por las críticas. Siempre tendrás amigos que te entiendan y ayuden.


1 comentario:

  1. Y espérate Antonio, que todavía les han de decir que pongan Pais Vasco (que les gusta más. O si te descuidas le cambian el nombre yt le ponen LA OREJA DE VAN GOGH, que suena más a "amiguetes" y además sólo cantan (en perfecto español).

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