Mi madre, Mari Tere, solía leer fotonovelas. Eran unas publicaciones con historias románticas plagadas de moralina y acompañadas por ilustraciones que hacían más visual aquellos relatos ñoños y dedicados al público femenino mayormente. La autora de aquel serial de relatos firmaba los mismos como “Corin Tellado”, una prolífica autora gijonesa que, en realidad se llamaba María Socorro del Tellado López. “Socorrin” -de donde devino “Corin”-, como le llamaban cariñosamente sus hermanos, llegó a publicar en su dilatada trayectoria más de 5000 títulos, algunos de los cuales fueron traducidos a 27 idiomas y llevados al cine, la radio y la televisión, figurando en el libro Guinness de los récords como la escritora más productiva en lengua española por haber vendido más de 400 millones de ejemplares de sus novelas , siendo la literata castellana más leída después de Miguel de Cervantes.
Tellado era, por tanto, un apellido conocido y valorado en
miles de hogares. Sus publicaciones eran esperadas y consumidas con avidez,
quizá por el tenor edulcorado de su contenido. Un contenido cuyo éxito se
fraguó en la intención de no incomodar
nunca a nadie con las historias.
Actualmente, el apellido “Tellado” que conocemos no tiene
nada que ver con “Corin”. Ni su producción es tan valorada o seguida como la de
la narradora asturiana. El Tellado que hoy trasciende es la encarnación
política de un “meme”. Un vomitador de ocurrencias cuya principal virtud es ser
un provocador sin más interés que complacer los oídos de quienes alimentan la
dinámica tabernaria de descalificar al adversario.
Y es que Miguel Tellado, que así se llama el portavoz del
Partido Popular en el Congreso de los Diputados, ha crecido en el seno del
Partido Popular gracias a su retórica de
charlatán maleducado. De joven militó en la izquierda nacionalista galega, al
lado de Xoxe Manuel Beiras y su paso por una radio local dominada por el BNG,
le acercó a las costas del PP donde
agudizó su ingenio para abrirse paso en
una carrera meteórica le ha llevado , por su verbo desenfrenado e insultante, a la cúpula
del partido de los genoveses.
Desde siempre, los partidos políticos españoles, y
especialmente los representantes de la derecha, han diversificado su
representación pública en portavoces “templados”, y lenguaraces “fake”, capaces
de convertir el debate político en una
porqueriza. Una estrategia de comunicación similar a la teoría del “poli bueno”
versus “poli malo”.
Recordamos en esa disyuntiva al Álvarez Cascos de Aznar, al
Floriano de Casado y Cospedal, o al
Rafael Hernando de Rajoy . Cuantos minutos de “gloria” y disparates pronunciados frente a un micrófono
emulando la creatividad ponzoñosa del “maestro” Federico Jiménez Losantos.
Pero el último “valor” de la escuela chusquera del “fango” se
sale del plano habitual. El derrape
verbal permanente de Manuel Tellado parece indicar su necesidad meritoria de ser creativo para no perder la posición de referente en el principal partido de la oposición
española.
En el foco de su diana de lengua viperina ha estado en esta
última semana el Partido Nacionalista Vasco. Días atrás ya había hecho un
avance acusador contra el PNV, pero en estas jornadas últimas se ha superado. Manipulando
el hecho de que, en virtud de la ley de memoria democrática el PNV conseguía la devolución del
inmueble parisino de Avenue Marceu,
incautado y expropiado por los nazis y entregado
al gobierno de la dictadura franquista, Tellado articuló una discurso acusador
infame. A su delirante juicio “el
PNV se ha convertido en el partido
aprovechategui”, “partido rentista del Estado” que solo busca “hacer caja” en
un comportamiento “miserable y asqueroso”. “Aitor Esteban no quería un tractor, quería un palacete en
París y Sánchez se lo ha dado”. “El PNV cree que el País Vasco es de ellos y
que confunden lo público y lo privado” . Por eso “recurre al chantaje de un gobieno débil” y eso es
“miserable y asqueroso”. “El PNV ha quedado” para sacar los ojos al gobierno” condicionando
la “gobernabilidad de España para hacer
negocio” convirtiéndose en un “rentista del Estado”..
Las palabras del portavoz del PP solo pueden generar
vergüenza ajena y consternación . Cabreo ante la falta de respeto inconcebible de
un dirigente torpe e incapaz .Un pirómano encargado de dinamitar los escasos
puentes existentes entre el nacionalismo vasco y la derechona española,
escorada a más no poder hacia el
extremo.
Podría parecer que las palabras de Tellado fueran privativas del portavoz meritorio. Pero
para meritorio , Javier de Andrés, es exponente genuino del “atrevimiento”,
cuya madre, la ignorancia , exhibe a pecho descubierto. De Andrés, intentando
justificar lo injustificable llegó a decir el pasado jueves que "no hay
razón alguna de que ese palacio (Av.Marceu) vaya al PNV, porque nunca fue del PNV, se pagó
con dinero del Gobierno Vasco". Pese a que todas las pruebas, todas las
evidencias incluidas en el informe
aprobado por el Gobierno del Estado digan lo contrario, pese a que sea incontestable que la compra del inmueble con fondos propios
por militantes del PNV se produjera antes de que existiera tan siquiera el
Gobierno vasco o se aprobara el estatuto de autonomía De Andrés certifica con
aplomo falsificador dela verdad todo lo
contrario, y amenaza con denunciar al PNV por “financiación irregular”. Hay que
ser patán .
Pero Tellado y De Andrés no están solos en la dinámica de la
calumnia. Fue su jefe, Alberto Núñez Feijóo quien avaló el mensaje de crispación y ataque al PNV. “El Partido
Nacionalista Vasco es un satélite más del PSOE” y por eso “es imposible hablar” con el
nacionalismo vasco , porque “solo tiene intereses particulares”
La bravuconería, la descalificación o el insulto, generan
cabreo, pero mucho peor que la
indignación por sentirse agredido
está el fondo de la cuestión. Y en este
caso, el fondo la controversia estriba en que el PNV solamente ha reclamado
justicia histórica ante el expolio de su patrimonio ahora recuperado. No
perdamos de vista que la tropelía la ejecutó, ni más ni menos que la Gestapo, y
el robo fue asumido posteriormente por la dictadura franquista. ¿Acaso el PP cree
legitimado el saqueo patrimonial protagonizado por los nazis y asumido por el
franquismo? ¿Cree asumible el PP la represión y el castigo político de la
dictadura justificando y amparando la incautación de un inmueble ?
Las acusaciones vertidas por el PP contra el PNV, su defensa patrimonial de un
“botín de guerra”, desvelan la posición neofranquista en que Feijoó y los suyos
han convertido al Partido popular. Una posición incompatible con la democracia y especialmente con los
nacionalistas vascos . La actual deriva del PP anuncia tiempos complicados para
todos. Sobre todo si Feijóo, Tellado y compañía alcanzan su objetivo y con
campañas tan sucias como las
protagonizadas hoy consiguen acceder al
gobierno del Estado.
La polémica del “palacete de Marceu” no ha sido inocua ni
tan siquiera estética. Ha sido mucho más porque en ella el PP ha dejado ver su
alma más oscura.
Por otro lado, las posiciones de cada cual en relación a la
devolución patrimonial de los bienes confiscados por el franquismo, han
provocado una segunda reacción de pesadumbre en el PNV.
La desmemoria es un mal de nuestro tiempo. Digo esto porque,
aún entendiendo las razones que ha podido tener Junts para echar abajo el
último decreto “ómnibus” que el gobierno español presentaba en el Congreso para su
convalidación, en el PNV hemos sentido
el amargor de las consecuencias de tal “castigo” parlamentario por el rechazo
implícito que el voto negativo tuvo en la no ratificación de la devolución del
patrimonio histórico incautado por el
franquismo a los nacionalistas vascos.
Si Junts, para votar como lo hizo, optó por la desmemoria,
deberá asumir el malestar que su actitud ha generado en el PNV. Porque el palacete de Avenue Marceu que se sometía a devolución histórica, es y era legitimidad democrática
del PNV. Del mismo PNV que acompañó al president
Companys camino del exilio cuando el resto de fuerzas políticas le dejaron solo
al final de la guerra. El mismo PNV que compartió con él zozobra vital y política camino a Perpiyná . Y
bien que lo compartimos como víctimas
igualmente cuando el verano del año 40,
con la ocupación alemana de Francia sentimos la represión de la Gestapo y de
los nazis-Companys fue detenido y deportado a la España franquista para ser
posteriormente fusilado por los mismos que asaltaron el palacete parisino y lo entregaron a la
dictadura. Que pena de desmemoria.
Vale. Todo correcto. El PP es malo, malísimo. Estan todos los puentes rotos y bla, bla, bla. Y
ResponderEliminarsin embargo, hay cuestiones que quedan como una incoherencia absoluta. Os apoyasteis en el PP, al nenos en Durango -abrazo incluido-, en la Diputación de Gipuzkoa y votasteis a favor de la no aplicación del impuesto a Josu Jon Imaz (repsol) en el congreso junto con, como no, el PP, VOX y JUNTS, que votaron en contra de la recuperación del palacete parisino. ¿Que concepto tenéis de los vascos y vascas? ¿Pensais que todos somos idiotas menos vosotros?